— ¡Ya voy! Perdónenlo, nos retiramos — decía pelinegro inclinándose para igualmente despedirse de los príncipes y guardias. Para salir tras su rubio amigo
Viendo
el azabache como se retiraba junto a su prometido junto a su pelinegro amigo le
pregunto a su rubio guardia.
—
¿Por que se fue Naruto? Minato-sama – decía con un poco de curiosidad he
exigiéndole
—Lo
conozco tanto que se le olvido decirle a su mamá, que había ganado el desafío y
que usted es su prometido –le mencionaba mostrándole una gran sonrisa al
azabache. Que en realidad escondía algo
—Usted
cree que se le olvido decirle a su madre, si ayer se fue muy alegre avisarle cuando
se entero de su llegada — le contaba al blondo lo ocurrido
—Si
― asentía con el movimiento de la cabeza — lo supuse cuando lo vi aquí y mas
sin su madre la cual se parece al el — declaraba el rubio viendo como lo miraba
el azabache asimilando todo lo que estaba diciendo
“Ya vi porque mi padre tiene tanta confianza en
Minato-sama, pero lo que no entiendo por que tiene a Naruto como su hijo. Si se
nota que no tiene su inteligencia y su forma de razonar tan ágilmente yo creo
que mi dobe lo heredo de su madre tendré que conocerla lo antes posible “
—
¿Pasa algo...príncipe? — pregunto Minato al ver que el de piel nívea ya no se
inmutaba
—Perdón
dijo algo…— decía cuando el rubio lo había sacado de sus pensamiento — estaba
pensando en varias cosas — le mencionaba tomándose de la barbilla —Bueno hay
que entrar que mi padre los esta esperando — le dijo.
Así
lo cinco entraron al gran palacio que este parecía como cualquier otro torre
altas con tonalidades grises por lo años al servicio de imperio, pero se veía
totalmente arreglado y chico. Más al entra era otra cosa ya que era demasiado
espacioso con alfombras de color carmesí con bordes dorados y los pisos que no
cubrían las alfombras de mármol y algunas estatuas de jade. Siendo recibido por
la servidumbre del palacio esta bien montado en la escalera principal que
llevaba a las habitaciones superiores. — Bienvenidos sean — decía un castaño
con una coleta de piel morena con una cicatriz que surca por encima de la nariz
que traía puesto un conjunto de color negro como la mayoría de demás
servidumbre
—Gracias,
Iruka-san — decía el pelinegro mayor — nuestros padres ¿en donde se encuentra?
—Se
encuentra en el salón real — le respondía el castaño
—Puedes
preparar una habitación para el príncipe Gaara por favor — le decía señalando
al presente príncipe que asintió con la cabeza para presentarse.
—Si
príncipe.
Le
agradeció al moreno y se dirigieron al salón real que a pesar de que era el
principal era bastante caminata, que al pasar se veían varios cuadros de los
emperadores anteriores. Que al igual que la entrada estaba alfombrado de color
carmesí estatuas de jade como de mármol en fondo de ese gran pasillo. Se veía
dos puertas de roble totalmente pulido que al abrirse el salón se veía un piso
totalmente blanco que el que lo viera directo por un largo tiempo quedaría
aturdido bastante tiempo, un ventanales grandes que eran cubierto por unas
extensas cortinas color vino y al final se encontraban dos tronos con los
actuales emperadores de ese gran imperio y dos respectivo guardias observando
como entraban lo dos azabaches, el par de rubios y el pelirrojo.
—Padre,
ya han llegado — decía el azabache menor — y han traído al príncipe del reino
de suna para... —se detuvo en su oración y se quedo pensativo por que en
realidad no sabia por que había ido príncipe si nada mas se iba ser el tratado
de paz. Cuando de pronto fue interrumpido por el pelirojo diciendo
—Casarme
— dijo muy decidido, lo que provoco una gran conmoción para los ahí presentes
menos para Itachi, Minato y Deidara. Que ya sabían después de largas pláticas
con el pelirojo y su hermano que estaba en reino de Suna que solo ocupaba
momentáneamente el trono
—Pero
príncipe...
—Gaara,
su alteza — decía el bermejo
—Príncipe
Gaara — decía con un deje de preocupación el emperador — perdón pero yo no
tengo ninguna hija o doncel para que usted tenga que casarse y formar una
alianza si es lo que espera.
—No
su alteza esta entendiendo mal… — explicaba el bermejo — lo que yo quiero es
encontrar un o una prometida en su reino para poder casarme por que en mi reino
tenemos la misma ley que en su reino que para podernos convertir en emperadores
tenemos que tener a nuestra o nuestro fiel acompañante y así cuando yo me
convierta en emperador automáticamente se hará la unión de nuestros reinos. Ya
que igualmente se lo había comentado a su hijo Itachi, pero sobre todo venia a
conocerlo a usted y al futuro emperador— mirando de reojo a Sasuke.
—Ya
entendí — ya relajado por lo que había
escuchado — Kakashi — le decía a un
hombre con cabellera peli plata con ojos bicolor que traía puesto su traje de
guardia que consistía en saco azul con una estola dorada su pantalón con bordes
rojos y un cinturón en donde carga una espada de lado izquierdo.
—Dile
a Iruka que prepare una habitación para el príncipe.
—Si
señor — se inclinaba para retirarse el peli plateado cuando fue detenido
—
¡No Kakashi! ya le he dicho — le mencionaba Itachi privando aquel guardia de ir
a ver a delfincito como el apodaba
—Gracias
su majestad —dijo resignado regresando al lugar donde se encontraba
—Y
príncipe Gaara cuanto se va a quedar.
—Todavía
no lo se...tal vez cuando encuentre a mi propuesta — decía recordando al
pelinegro que acompañaba al rubio menor —Sai —decía susurrando al recordar como
había dicho el rubio cuando le golpeo la cabeza
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En centro del reino para ser exactos saliendo
de un comercio de artículos de arte en donde se encontraba el pelinegro y
cierto rubio
—Me
tiene que decir que te dijo Sakura para que no le dijeras a Kushina-san de tu
compromiso — decía muy enojado el ojinegro
—Nada
de importancia — decía rascándose la nuca — simplemente que Sasuke jamás seria
mío, pero no le tomes importancia son absurdos celos que tiene Sakura desde
niña
Flash back
(La noche anterior)
—Te
acuerdas cuando le cayeron los baldes de pintura a Kakashi-sensei — le contaba
el rubio de la broma que había hecho — ja, ja. — reía recordando el momento
—Ja,
ja, ja, ja, parecía uva— igualmente reía la pelinegra recordando las bromas que
había hecho algún tiempo atrás su amigo.
Cuando
inmediatamente llego una peli rosa con un vestido de color rojo con una cinta
alrededor de la cintura color blanco y traía entre sus manos una pequeña maceta
una rosa muy hermosa irónicamente de color rosa diciendo
—Maldito
ahora si me vas a conocer — decía muy colérica la peli-rosa agarrado de las
ropas del rubio y tirando la rosa — te dije que no te acercaras a la
competencia.
—Cálmate
Sakura — decía pelinegra agarrando de los brazos — no lo podías evitar. Si no
hubiera asistido probablemente hubiera sido otra o nadie.
—Quítate
Hinata este no es tu problema — decía soltando agarre del rubio – “no valen la
pena” –decía tomando otro camino – pero Sasuke jamás… escúchame ¡jamás será
tuyo!
Fin flash back
—Ya
vez no es de importancia y simplemente se me olvido — decía tranquilamente
tomando una bebida que anteriormente había comprado — y como seguimos Hinata y
yo recordando mis antiguas bromas que ya no le dije a mi Oka.
—Pero
debería cuidarte – mencionaba preocupado el pelinegro - que lo celos matan, y
no por que hace tiempo fuimos amigo signifique que se va apiadar de ti
acuérdate que cambiamos mucho cuando te fuiste con tú abuela.
—Si…si,
pero ya vámonos que le tengo que decir a mi oka. Me acompañas y me ayudas a
decirle que no creo que me crea — le mencionaba mostrando un sonrisa mientras
agarraba brazo para salir corriendo a su casa.
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